Muy bueno para los que tuvieron agua todo el año…

Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Ica, 31 de diciembre de 2021
Para Lampadia

El año 2021 que acaba de terminar, fue un buen año de agua. Efectivamente, hubo agua en abundancia. Me refiero a la temporada de lluvias de principios de año, entre enero y abril, y al final del estiaje, desde mediados de noviembre en adelante, cuando empezó a llover nuevamente. 

La gente se olvida, pero durante el verano pasado – como siempre – botamos cualquier cantidad de agua dulce al mar. Y por si fuera poco, tuvimos desbordes e inundaciones por la gran cantidad de agua que tuvimos en nuestros ríos y canales. Incluso, producto de las lluvias, hubo huaicos de lodo y piedras que cortaron carreteras y caminos, y arrasaron con todo lo que encontraron en su camino.

Por otro lado – como era de esperar – no llovió entre mayo y octubre, tal como ocurre todos los años, desde toda la vida. El estiaje es así… no llueve. Siempre ha sido así. Eso lo sabemos los agricultores de Costa, Sierra y Selva; y del Norte, Centro y Sur. Todos.

Ahora bien, quienes estamos involucrados en el quehacer agrícola, también sabemos que las plantas producen más – y mejor – cuando tienen agua todo el año, no sólo cuando llueve. 

Para ello, algunos hemos construido reservorios donde guardamos aguas sobrantes de la temporada de lluvias. Otros han perforado pozos para extraer agua del subsuelo. Así – con reservorios y / o pozos – los agricultores modernos y eficientes tenemos agua todo el año.

He ahí la principal diferencia entre la agricultura altamente productiva y la agricultura precaria: el agua. Y si el agua se maneja a través de sistemas de riego tecnificado, mejor aún. Entonces, la disyuntiva es: ¿agua todo el año, o agua solamente cuando llueve? 

Esa es la diferencia entre la agricultura empresarial, que emplea formalmente a un millón de trabajadores, y que en el 2021 batió todos los récords de exportaciones de uvas de mesa, arándanos, paltas, cítricos, y demás; y la pequeña agricultura tradicional, que emplea informalmente a cinco millones de peruanos, y que la está pasando mal… muy mal.

Pregunta del millón: 

  • ¿Tan difícil es entender la problemática del agua para la agricultura? 

  • ¿Acaso, tener o no tener agua todo el año – más el riego tecnificado – no hace la diferencia entre una agricultura próspera y una agricultura pobre? 

  • ¿Por qué no priorizar la construcción de reservorios – y pozos – en todo el país, para que los pequeños agricultores produzcan más, y dejen de ser pobres?

Pues bien, eso que es tan sencillo de explicar, y de sentido común, aparentemente no lo es para nuestras autoridades políticas. Sobre todo, para las del Ministerio de Agricultura. Porque si así fuera, la conclusión sería aún peor: a nuestros políticos les importa un bledo que los pequeños agricultores se mueran de hambre. 

¿Ignorancia o indolencia? ¡Esa es la cuestión! ¿Qué tienen nuestros políticos que no ven la solución a la problemática del agua para la agricultura? De repente, son ambas cosas a la vez: ignorantes e indolentes.

Si no cómo explicar que se vayan tanto por las ramas con la cantaleta de la 2ª. Reforma Agraria. ¿A quién se le puede ocurrir que una planta de fertilizantes en Bayóvar va a resolver la problemática de la pequeña agricultura ¡si no tienen agua! 

¿Qué efecto podrá tener – más allá de la pose y la demagogia política – que el presidente Castillo regale tractores a agricultores que no tienen agua? O que el Gobierno ofrezca financiamiento, o comprar su producción ¡si no producen… porque no tienen agua!

No priorizar el agua y el riego tecnificado, es como poner la carreta delante de los burros. Todo lo demás – mecanización, financiamiento, industrialización, compras estatales, reorganización del Ministerio de Agricultura, Servicio Civil de Graduados, etc. – es secundario. Repito. La carreta delante de los burros: esa es la imagen que mejor caracteriza al Ministerio de Agricultura de cara a la pequeña agricultura, o agricultura familiar.

Conclusión: la máxima prioridad para la agricultura debe ser el agua. Abramos los ojos a la realidad. El 2021 que acaba de terminar fue muy bueno para los agricultores que tuvieron agua todo el año… pero pésimo para los demás. Lampadia




2ª. Reforma Agraria… mucho ruido y pocas nueces

Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Ica, 1 de octubre de 2021
Para Lampadia

Llamarle pomposamente 2ª. Reforma Agraria a un conjunto de actividades y programas inherentes al Ministerio de Agricultura es pura demagogia política. Y anunciarla un 3 de octubre – fecha del golpe militar de Velasco en 1968 – denota el sesgo irrefrenable de este Gobierno, por aquel estatismo retrógrado, totalitario y fallido de los aciagos años 70´s y 80´s en nuestro país.

Efectivamente, Velasco fue un expropiador nato. Expropió todo lo que se le cruzó por la mente: petróleo, minería, pesca, gran parte de la industria y el comercio, energía, telefonía, banca, medios de prensa y televisión, algunas salas de cine (el tipo estaba loco), hoteles, y – por supuesto – tierras agrícolas. Las empresas agrarias – incluidas las maquinarias, ganado, instalaciones, y todo – fueron expropiadas, sin pago alguno, dentro del marco de la Reforma Agraria de entonces, que como se sabe, fracasó al poco tiempo de su promulgación.

Sin embargo – según el propio Presidente Castillo – la 2ª. Reforma Agraria no va a expropiar nada. ¿Para qué – entonces – la denominación reformista? Y – peor aún – ¿para qué el 3 de octubre? ¡No nos vengan con cuentos! Castillo tenía 364 días del calendario para anunciar una medida como la 2ª. Reforma Agraria, y escogió el único día del año en el que – repito – Velasco dio un Golpe de Estado, con el que se iniciaron las expropiaciones confiscatorias y el estatismo perverso en nuestro país.

Por otro lado, recién se ha conformado el Grupo de Trabajo que elaborará el Plan de Acción correspondiente. O sea, la 2ª. Reforma Agraria es – por ahora – sólo un título. O – en el mejor de los casos – una idea vaga, sin ningún detalle de quién va a hacer qué, ni cuándo. Y tampoco se sabe cuánto costará, ni de dónde saldrán los recursos.

Lo único que se sabe es que estará basada en ciertos lineamientos, bien intencionados, como Seguridad Alimentaria, Asociatividad y Cooperativismo, Productividad y Competitividad, Ingreso a Mercados, Afianzamiento Hídrico, Tecnificación, Industrialización, Servicio Civil de Graduados (SECIGRA), Capacitación de Pequeños Productores, Caminos Rurales, entre otros. Al menos, eso es lo que dicen.

La pregunta es ¿acaso no son esas funciones inherentes al Ministerio de Agricultura? Entonces ¿para qué llamarle Reforma a algo tan rutinario y propio de la institución rectora del sector? ¿Para qué parecerse a una medida fracasada como la Reforma Agraria de Velasco, que empobreció – hasta la miseria – a millones de compatriotas?

Ahora bien, en lo que va de este Gobierno – 60 días y más – no se ha dado ninguna medida de reducción del gasto improductivo en el Ministerio de Agricultura, lo cual avizora que la 2ª. Reforma Agraria no va a tener recursos para su implementación. Todo se va a gastar en burocracia, consultorías y papeles… como siempre. Y nada en el campo.

Como dije en el artículo de la semana pasada – aquí en Lampadia – (2ª. Reforma Agraria… tan retrógrada y acomplejada como la 1ª.), este Gobierno no achunta una. Y – en este caso – por generar tantas expectativas… para nada, le va a salir el tiro por la culata.

Los lineamientos de la 2ª. Reforma Agraria están bien. Nadie – en su sano juicio – podría estar en contra de ellos. Pero no se necesitaba tanta pompa para anunciar programas y actividades propias del Ministerio de Agricultura. Aun así, nada de lo anunciado se va a lograr. Nada va a beneficiar a la agricultura de nuestro país, y menos a los pequeños productores del campo. La burocracia inepta, indolente y elefantiásica del Estado aguará la fiesta. La organización criminal estatista, retrógrada, terrorista y corrupta que nos está gobernando – empezando por el Presidente Castillo y el Premier Bellido – lo echarán todo a perder.

– Mucho ruido y pocas nueces – es un refrán muy popular, que en este caso significa que la 2ª. Reforma Agraria es puro floro y cero sustancia. Lampadia




2ª. Reforma Agraria… tan retrógrada y acomplejada como la 1ª.

Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Ica, 24 de setiembre de 2021
Para Lampadia

Este Gobierno no achunta una. Concretamente, me refiero a la conformación del Grupo de Trabajo que acaba de convocar el Ministerio de Agricultura, para implementar la llamada 2ª. Reforma Agraria.

Resulta que la convocatoria excluye a los representantes del sector agroexportador. Precisamente, el sector más moderno y competitivo de nuestra agricultura. El sector que – a decir de muchos – constituye una de las agriculturas más productivas y tecnificadas del mundo.

Nótese que la Resolución Ministerial en cuestión, señala que el objetivo del grupo es formular el Plan de Acción para el Desarrollo del Sector. Es decir, de todo el sector.

La pregunta es

  • ¿acaso los productores de frutas y hortalizas – que este año van a superar todos los récords históricos de exportaciones – no son parte del sector agrario?
  • ¿Acaso no hay un encadenamiento productivo – creciente y virtuoso – entre el sector agroexportador y la pequeña agricultura?
  • ¿Acaso no han visto cuánto han crecido – gracias a estos encadenamientos – las exportaciones de paltas de los pequeños productores de Huancavelica, Ayacucho y Apurímac?
  • ¿Acaso no están al tanto de las transferencias tecnológicas de las empresas en favor de los pequeños agricultores, y del millón de empleos formales generados en el sector agroexportador?

Ciertamente, no. Tanto que – como mencioné anteriormente – el sector agroexportador no participará en la formulación del Plan de marras. Y – en cambio – sí participarán los Viceministerios de Políticas y Supervisión del Desarrollo Agrario, y de Desarrollo de Agricultura Familiar e Infraestructura Agraria y Riego.

También participarán las Direcciones Generales de – miren bien – Políticas Agrarias, Gestión Territorial, Estadística, Seguimiento y Evaluación de Políticas, Saneamiento de la Propiedad Agraria y Catastro Rural, Desarrollo Agrícola y Agroecología, Desarrollo Ganadero, Asociatividad, Servicios Financieros y Seguros, Infraestructura Hidráulica y Riego, Planeamiento y Presupuesto, y Compensaciones para la Competitividad. O sea, la crema y nata de la burocracia papeluchera, inútil y corrupta. Entre paréntesis ¡habrase visto tanta burocracia estatal que – a la luz de la realidad – jamás sirvió para nada!

Y por el lado “productivo” – y lo pongo entre comillas porque de “productivo” no tienen nada – participarán la Convención Nacional del Agro Peruano (CONVEAGRO), la Confederación Nacional Agraria (CNA), la Central Única Nacional de Rondas Campesinas (CUNAR), la Junta Nacional de Usuarios de los Sectores Hidráulicos de Riego, la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP), y la Federación Nacional de Mujeres Campesinas Artesanas Indígenas Nativas y Asalariadas del Perú (FEMUCARINAP).

¿Qué Plan de Acción puede salir de ese sancochado? Mejor… ¡ni imaginarlo! ¿Sabrán algo de planificación estos señores? Por lo visto… no. No, porque – aparte de excluir a los agroexportadores – no están considerando a otros actores relevantes como los proveedores de equipos e insumos agrícolas, los distribuidores y clientes de los productos agrícolas, los agentes financieros, las universidades e instituciones de investigación, entre otros.

Además, queda claro que esta gente cree que un Plan de Acción es un documento. En ese sentido – seguramente – en diciembre 2021 van a haber redactado un documento. Puro papel. Más aún, van a tomarse fotos con la carátula del documento… todos agarrados de la mano. Van a sentirse felices de haber producido un documento, denominado Plan de Acción – con miles de hojas – lleno de buenas intenciones. Un documento – como los muchos que produce el Estado – que no servirá para nada.

¡Una pena! Una vez más, el Estado peruano va a atiborrarnos de normas y procedimientos que pocos respetarán. Y que sólo servirán para justificar abusos de poder, consultorías amañadas, y coimas por doquier.

CONCLUSIÓN: Nada bueno debemos esperar de la 2ª. Reforma Agraria, aparte de más pobreza, más informalidad, más desnutrición, más marginación, más delincuencia, más discriminación, más desempleo, y más dependencia alimentaria del exterior. Es decir, más de todo lo malo. A eso nos va a llevar la 2ª. Reforma Agraria retrógrada y acomplejada – similar a la 1ª. – que se está cocinando en el Ministerio de Agricultura. Lampadia




El Ministerio de Agricultura se reconvierte hacia la agricultura familiar

Jaime de Althaus
Para Lampadia

El 13 de mayo pasado la Convención Nacional Agraria (CONVEAGRO) -que integra a varios gremios principalmente no exportadores[1], a la Confederación Nacional Agraria (CNA),  a la Confederación de Campesinos del Perú (CCP) y a ONGs como CEPES y DESCO-,  y la Junta Nacional de Usuarios de los Distritos de Riego del Perú (JNUDRP), que reúne  a 114 juntas de usuarios que agrupan a 1,582 comisiones de usuarios con dos millones de productores agrarios empadronados, realizaron un paro agrario que logró bloquear varias carreteras a nivel nacional.

Por cierto, hubo presencia y consignas de izquierda en esa movilización, hay dirigentes gremiales radicales, pero sin duda algunos de los reclamos son plenamente justificados ante un Estado que ha abandonado toda tarea consistente para modernizar la pequeña agricultura en el país. Incluso podríamos decir que las demandas de naturaleza rentista o proteccionista que esgrime la plataforma del paro obedecen precisamente al atraso relativo de estas unidades productivas, que en lugar de defenderse con un aumento de la productividad lo quieren hacer con medidas artificiales que entrañan un subsidio de la sociedad en su conjunto hacia ellas.

Muchos de estos agricultores, sobre todo en la Costa, son aquellos parceleros que se dividieron las tierras de las cooperativas de producción en las que la reforma agraria convirtió a las prósperas haciendas de la costa. Parceleros que no han logrado incorporarse al mundo de la agroexportación y que tampoco han mejorado sus propios cultivares para el mercado interno. Tienen, en general, baja productividad y escasas utilidades cuando no sobreviven en niveles de subsistencia. En la Sierra muchas unidades familiares mantienen producciones de autoconsumo. Son, en suma, un legado de la Reforma Agraria, con el agravante inexcusable de que esto se mantiene así más de 40 años de terminada esa reforma.

Tecnificación en lugar de protección

La consecuencia es que se exige medidas que pueden convertirse, como decíamos, en transferencias de ingresos o subsidios o del conjunto de la sociedad al sector agrario si es que no se aborda el problema de fondo. Se pide, por ejemplo, una “transferencia inmediata de 1,500 millones de soles (del presupuesto nacional) al Agrobanco para que tenga capacidad de atención nacional y sea una banca de fomento”. Pero ya sabemos lo que ocurre con el banco Agrario. Ha sido hasta ahora un barril sin fondo. La banca comercial podría atender los emprendimientos agrarios si tuvieran rentabilidad.  

Se demanda también, por ejemplo, “precio justo para las fibras y evitar el monopolio de la industria Alpaquera y de Camélidos sudamericanos”. ¿Qué es precio justo? Lo que sí sabemos –nos dije la ministra de Agricultura Fabiola Muñiz- “es que los costos son altos porque no se maneja temas como la sarna, falta de pastos o la mejora de estos para bajar la mortalidad, la caza furtiva, la mejora genética para afinar la fibra, etc.”

Se pide, asimismo, “restablecer los niveles arancelarios y la franja de precios, y proteger producción agropecuaria nacional”. Es cierto que hace un par de años se redujo el arancel, pero la franja de precios se mantiene y se activa cuando el precio desciende por debajo de cierto rango. Nuevamente acá la salida es mejorar la productividad o reconvertirse hacia productos de agroexportación.

Agricultura familiar

Sin embargo, en medio de esos pedidos mercantilistas, aparece una demanda justa y necesaria, que da pie a la solución de fondo. Es la que pide “presupuesto para desarrollar la ley 30355 ‘Ley de Agricultura Familiar’ e implementación de Sierra Productiva y similares”. Esto ha llevado a la ministra Fabiola Muñoz a tomar la decisión de reestructurar el Ministerio orientándolo al mejoramiento de la agricultura familiar, algo que debió ocurrir hace mucho tiempo. El Ministerio se llamará ahora de Desarrollo Agrario y tendrá dos viceministerios: el de Agricultura Familiar y el de Servicios Agrarios.

Articulación entre grandes y pequeños en la Costa

De lo que se trata, nos explica la ministra, es que, en la Costa, los grandes se articulen con los pequeños. En Ica, por ejemplo, hay 200 fundos grandes agroexportadores y 8,000 parceleros. Se viene gastando 600 millones de dólares en la erradicación de la mosca la fruta y no se logra su desaparición, debido a que los parceleros tienen árboles de pacaes, mangos o ciruelos en los bordes de sus parcelas. Entonces los técnicos del Senasa, en lugar de brindar asistencia técnica para su reconversión, visitan a los parceleros para para fumigar esos árboles. La propuesta del ministerio es cambia esos frutales por pecanos y, sobre todo, reconvertir la mitad de la parcela a la agroexportación con asistencia técnica y con un 40% descuento en agua, que es el factor caro. Y sembrar la otra mitad con pan-llevar, pero con semilla certificada. 

Y aquí ingresan los agro exportadores en el esquema. Estos, por lo general, necesitan más área, y entonces la idea es que el jefe de campo del fundo agroexportador se convierta en el jefe de campo de los parceleros. Así ganan todos. El papel del Ministerio en esto sería vincular a las partes. Según la ministra, este modelo ya habría sido validado.

Otra estrategia en la que piensa el Ministerio es en dar incentivos diferenciados para la reconversión. En Tumbes, por ejemplo –nos informa la ministra-, se siembra 15 mil hectáreas de arroz, 5 mil de bananos y 1,000 de limón. El arroz da una utilidad de 1,000 soles por hectárea al año, el banano 10,000 soles y el limón 17,000 (aunque en este último caso debe esperarse 4 años). Además, la vocación productiva del valle es la fruta, no el arroz. Agrobanco debería prestar con una tasa más baja para sembrar frutales y Agroideas ofrecer planes de negocios no en arroz sino para reconvertir el arroz en frutales.

Estas ideas sin duda implicarán un cambio sustantivo en la capacidad de acción del Sector. Según Ismael Benavides, ex ministro de Agricultura, “gran parte de la culpa de los problemas de los pequeños agricultores la tiene el propio Estado, pues no ha hecho su tarea y el Ministerio de Agricultura es un desastre. Un ejemplo del abandono es el Programa Agroideas que creamos en el 2008 para apoyar la reconversión de pequeños agricultores a la agricultura moderna que fue exitoso, pero ha sido casi abandonado en este Gobierno. Además, la prohibición de transgénicos fue fatal, pues evitó que la productividad aumentara en el campo. En China están usando papa transgénica desarrollada en el CIP en Lima, con gran éxito, pero que ¡no puede usarse en Peru por la prohibición!”

Riego familiar en la Sierra

Para la Sierra, se está pensando en pequeños reservorios y semillas certificadas. Y en la asociatividad. Esto último, sin embargo, revelaría que todavía el ministerio no tiene una idea clara de lo que se debe hacer. La asociatividad es una consecuencia natural de emprendimientos familiares prósperos que deciden asociarse para comercializar o transformar. No es un punto de partida. Es un punto de llegada. Lo esencial es tecnificar la agricultura familiar. Y eso es lo que asegura Sierra Productiva.

Carlos Paredes, Coordinador Nacional de Sierra Productiva, nos informa que la demanda presentada en la mesa de agricultura familiar que se ha creado, es que la mitad del presupuesto que destina el Ministerio a programas de riego en la Sierra sea ejecutado con el modelo Sierra Productiva. Con esa mitad, que equivale a 165 millones de soles, Sierra Productiva garantiza instalar 20 mil reservorios rústicos unifamiliares, riego por aspersión, pastos cultivados, huerto de hortalizas y otras tecnologías en cada unidad familiar.

Consideramos que es presupuesto destinado a Sierra Productiva podría ser largamente mayor reorientando gastos del Ministerio a ese fin. Si vemos el siguiente organigrama, hay un conjunto de proyectos especiales y unidades ejecutoras que vienen de décadas atrás y cuya existencia ya no se justifica y que tiene cada una, además, su propia administración. Una tarea de la ministra debería ser simplificar drásticamente esa estructura y destinar los ahorros a la agricultura familiar andina vía el proyecto Sierra Productiva.

El problema no está en los recursos, sino en las ideas, en las concepciones. Los programas y técnicos del ministerio conciben obras de irrigación mayores que en la Sierra difícilmente funcionan, y perciben que entregar la tarea de difusión tecnológica a los yachachik (campesinos tecnologizados) es una manera de perder el puesto. La ministra, entonces, tendrá que llevar a cabo un cambio cultural –revolucionario- dentro de su sector.

Por eso, Paredes propone que con la mitad de los recursos el ministerio siga haciendo lo que viene haciendo y con la otra mitad se ejecute Sierra Productiva, para comparar luego los resultados.

Es posible que estemos ante un cambio importante en el agro nacional si es que se entiende lo que se puede y debe hacer en la Sierra. Ojalá no nos equivoquemos. Lampadia

[1] Integran CONVEAGRO:

Junta Nacional de Palma Aceitera  (Junpalma Perú)
Universidad Nacional Agraria la Molina
Asociación Arariwa  para la promoción cultural andina
Asociación de Ganaderos Lecheros del Perú (AGALEP)
Asociación de productores de Papa y sus derivados del Perú. (APPAPA PERU) 
Asociación Departamental productores de Algodón Piura
Asociación Nacional de productores de algodón (ANPAL) Asociación Nacional de productores Carne Bovina FONDGICARV PERU
Asociación Nacional de productores Ecológicos (ANPE)
Asociación Nacional de Productores y Agroindustriales rurales de Quinuay granos andinos del Perú (ANPAR QUINUA PERU)
Junta Nacional del Café,
Asociación Peruana de Productores de Cacao
CEPES, DESCO, CCP,  CNA




Reforesta Perú gana Premio Nacional a la Innovación

Como ya hemos destacado en anteriores ocasiones, el desarrollo maderero y la reforestación (diferente al cuidado de los bosques), son en nuestra opinión una gran oportunidad de desarrollo productivo y ambiental. Por ejemplo, solo en la sierra peruana tenemos 7 millones de hectáreas con capacidad de reforestación. Con sembríos industriales de árboles podemos compensar no solo nuestras propias emisiones actuales y futuras, sino también, seguramente, las de buena parte del resto del planeta. Los bosques jóvenes, a diferencia de los maduros, tienen un alto metabolismo, es decir una alta capacidad de absorber y de fijar el carbono de la atmósfera por muchos años. Ver en Lampadia: Madera: Fabulosa reserva productiva.

El Perú ha desaprovechado la riqueza de sus bosques. Basta ver el mapa del Perú con cierto detenimiento para descubrir que el 50% de nuestro territorio está cubierto de bosques naturales (68 millones de hectáreas). Somos el segundo país Latinoamericano con esta riqueza y décimo primero a nivel mundial. A pesar de ello, hemos despreciado este inmenso potencial como se ve expresado en que nuestras exportaciones no llegan ni al uno por ciento de la demanda global por recursos forestales. Como hemos señalado en Lampadia, este es un desperdicio sin nombre, que las regulaciones actuales no llegan a corregir y se ve agravado por la tala ilegal que sufre la selva amazónica al punto de poner en riesgo de extinción especies como la caoba.

Esta es la razón por la que queremos destacar el gran trabajo de la empresa nacional Reforesta Perú, la cual obtuvo el reconocimiento especial del año «Mérito a la Innovación: Innóvate 2017» en diciembre del año pasado, otorgado por el Ministerio de la Producción (PRODUCE), a través de Innóvate Perú, por promover la recuperación y puesta en valor de las tierras degradadas de la amazonia peruana, a través de una tecnología de mejoramiento genético de las plantaciones forestales clonales.

“Si nosotros reforestamos 3 millones de hectáreas de los 10 millones de hectáreas que ya están deforestadas en la Amazonía, seremos una potencia mundial en forestales. De manera que estamos muy vinculados a las políticas públicas del Ministerio de Agricultura y del Ministerio de la Producción porque la cadena productiva empieza en la ciencia, a biotecnología y la genética, y termina en muebles, partes y piezas para exportar al mundo”, declaró Enrique Toledo, gerente general de Reforesta Perú.

Reforesta Perú recibió el cofinanciamiento de Innóvate Perú para desarrollar protocolos para la producción de plantones clonales de siete especies maderables nativas amazónicas, como la caoba, cedro, tornillo, capirona, marupa, estoraque, quinilla, en base a semilla vegetativa de árboles plus en la Región San Martín.

La innovación desarrollada por esta empresa tiene un alto impacto en el medio ambiente, genera mayores puestos de trabajo e impulsa el desarrollo sostenible de las comunidades aledañas. Para saber mas sobre este gran proyecto, compartimos un video muy informativo:

El entonces ministro de la Producción, Pedro Olaechea, indico que «la labor de Reforesta Perú permite el desarrollo de un bosque cultivado de rápido crecimiento que, además de producir madera legal y capturar carbono, reduce la pérdida de suelos por erosión y permite el retorno de la fauna silvestre». Asimismo, indicó que esta innovación tiene un alto impacto en el medio ambiente e impulsa significativamente la productividad de las áreas forestales y genera un alto número de empleos en el Perú.

Promovamos el sector forestal

Ya se ha demostrado que la rentabilidad de la producción maderera que proviene de plantaciones forestales es muy superior a la producción en bosques naturales. “Tanto es así que en una hectárea de bosques naturales la producción maderera genera una rentabilidad de entre 20 a 100 dólares, mientras que en una hectárea de plantaciones forestales se obtiene una rentabilidad de entre 1,500 a 1,800 dólares”, según publicó Gestion.

Nuestro país vecino, Chile, tiene instalado casi tres millones de hectáreas de plantaciones forestales y genera exportaciones en este rubro por más de US$ 8,000 millones mientras que el Perú no supera las 100 mil hectáreas a nivel nacional y sus exportaciones forestales anuales están por debajo de los US$ 400 millones.

Como hemos señalado en Lampadia, “el potencial de desarrollo del sector forestal en el Perú debería ser del orden de cinco veces el de Chile, y constituye un buen ejemplo de una magnífica oportunidad que se está desperdiciando para generar una producción forestal” de más de 40,000 millones anuales, dando empleo de calidad a toda la población de la selva y a buena parte de la de la sierra.

Como afirma Gestion ¨Una de las tareas del presidente Vizcarra en materia agraria debería ser la de instalar un millón de hectáreas de plantaciones forestales al año 2021. Si se logra alcanzar esta meta, se estima un aumento de hasta US$ 1,800 millones en las exportaciones madereras permitiendo adicionar anualmente hasta 1.7 puntos porcentuales al crecimiento del PBI agrario y generar más de 500 mil nuevos puestos de trabajo.”

Como señaló en Lampadia, antes de su sensible fallecimiento, Antonio Brack Egg, uno de los mayores problemas que impiden el desarrollo de la industria forestal es que “el estado no garantiza los derechos de los inversionistas y eso empezó antes del 2006, cuando un grupo de personas, cerca de Atalaya, invadió un campamento forestal con una inversión española calculada en 36 millones de dólares, quemó el campamento, se robó todo lo que podía llevarse, y gente política del gobierno de aquel entonces los apoyó. Eso paralizó enormemente. Tenemos que ser conscientes: El sector forestal en el Perú puede ser un sector económicamente poderoso, fuerte, pujante, pero tenemos que dar el marco y el control para que eso se verifique, y dar confianza al inversionista”.

Por lo tanto, si queremos desarrollar este sector, es necesario que el gobierno promueva inversiones privadas rentables de largo plazo, además de reducir regulaciones engorrosas y disuasivas de su desarrollo.  

Es hora de que empecemos a desarrollar esta industria y que apuntemos a ser una potencia maderera. Como es el caso de la explotación de otros recursos naturales, este desarrollo permitiría múltiples encadenamientos con otros sectores, una gran demanda de empleo de calidad, mayores exportaciones y recursos fiscales. Lampadia




Consolidando la Hermandad del Agua

Fernando Cillóniz B.
Gobernador Regional de Ica
Ica, 19 de enero de 2018
Para Correo Ica y Lampadia                                     

Los amargados no creen… pero no importa. Si no reconocen la eliminación de las colas en nuestros hospitales ¿cómo van a aceptar que estamos avanzando en lo del Agua Grande? ¡Imposible! Si no reconocen lo que ven… ¡cómo van a reconocer lo que no ven! Además ¿para qué hacerles caso? Que sigan chillando que no hemos hecho nada. Nada – ni nadie – los va a sacar de sus amarguras… ni de sus cegueras.

Lo importante es avanzar. Los Consejos Regionales de Ica y Huancavelica – ambos por unanimidad – aprobaron hace poco la suscripción del Acuerdo Tripartito entre el Ministerio de Agricultura, el Gobierno Regional de Huancavelica, y el Gobierno Regional de Ica para ejecutar la Iniciativa Privada Cofinanciada (IPC) denominada “Sistema de Afianzamiento Hídrico en los Valles de Ica y Pisco y Áreas Irrigables de las Provincias de Huaytará y Castrovirreyna en Huancavelica”. ¡Tráguense ese sapo… amargados, incrédulos, renegados!

Ahora bien, la “Hermandad del Agua” implica más acciones… aparte de la IPC antes mencionada. Por ejemplo… la conformación del Consejo de Recursos Hídricos del Alto Pampas, y los ríos Tambo, Santiago e Ica. Asimismo… la conformación de los Consejos de las demás cuencas compartidas con Huancavelica. La “Hermandad del Agua” implica – también – la constitución de la Mancomunidad Regional Huancavelica – Ica (MANRHI) para que sea la unidad ejecutora de los proyectos de Siembra y Cosecha de Agua que estamos haciendo en las partes altas de todas nuestras cuencas comunes.

El Proyecto Especial Tambo Ccaracocha (PETACC) es ahora un proyecto birregional, y forma parte de la MANRHI. Es increíble cómo una simple medida administrativa puede mejorar tanto el ambiente para el diálogo entre dos pueblos hermanos. ¿Por qué nos demoramos tanto en establecer un diálogo basado en el respeto, equidad, justicia, y sostenibilidad… con Huancavelica? La verdad… no se sabe. Pero lo que sí se sabe es que nuestro diálogo con Huancavelica atraviesa por su mejor momento de los últimos 70 años.

Todo lo anterior: la IPC, los acuerdos de los Consejos Regionales, el Consejo de Recursos Hídricos, la MANRHI, el PETACC birregional, el diálogo con Huancavelica, los proyectos de Siembra y Cosecha de Agua… todo es real y avanza viento en popa.

Más bien, lo que falta – para redondear la faena – es el dispositivo que determine el Pago por Servicios Ecosistémicos. ¿Qué es eso? Pues una tarifa mínima que todos los usuarios de agua de las partes bajas de nuestras cuencas – agricultores, ciudadanos, comerciantes, industriales… – debemos pagar para ejecutar de manera continua y permanente los proyectos de afianzamiento hídrico. Básicamente, para construir reservorios y para plantar bosques en las partes altas de nuestras cuencas… a perpetuidad.

El mecanismo ha sido diseñado por el Ministerio del Ambiente, y tanto Ica como Huancavelica estamos de acuerdo. Realmente, sería una gran cosa que la Región Ica – desde Chincha hasta Nasca – dé el ejemplo a todo el país, respecto a cómo se debe hermanar la Costa con la Sierra.

Esa es – pues – la “Hermandad del Agua” que algunos amargados no quieren ver. Una relación entre pueblos que comparten – de manera natural – una misma cuenca. Es decir, un territorio cuyas aguas confluyen todas a un mismo río, lago o mar.

¿Quién inventó las fronteras territoriales entre Ica y Huancavelica? Ciertamente fueron los conquistadores españoles, pero ¿quién exactamente? ¡Sabe Dios! Sin embargo, es evidente que quien haya inventado la frontera entre Ica y Huancavelica fue un ignorante redomado en materia de manejo de cuencas hidrográficas.

Para eso – precisamente – es la “Hermandad del Agua”. Para reparar el error histórico de los que inventaron – ignorantemente – la demarcación territorial en nuestro país. Algo así como una herramienta integradora para que todos los peruanos tengamos agua. Agua para todos… todo el año. Agua para los de arriba y agua para los de abajo. Pero sobre todo… agua en los estiajes. Lampadia




Ministerio de Agricultura se queja de Lampadia

El 20 de febrero publicamos en Lampadia: Escandalosas irregularidades en el MINAGRI. Esto dio lugar, primero a una comunicación de la empresa ATA, separando sus responsabilidades de las de la persona del ministro, a quién iban dirigidas nuestras críticas. En su momento respondimos mediante nuestro post: Nuestra crítica al Ministro de Agricultura y Riego

Posteriormente, el ministerio de Agricultura, mediante carta notarial del 2 de marzo, firmada por el Director de Comunicaciones e Imagen Institucional, se quejo de las ‘falsedades’ de las afirmaciones de Lampadia. Ver carta del ministerio: Ministerio de Agricultura y Riego.

Con posteridad a nuestro artículo original, tuvimos acceso a la carta que AGAP (Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú) dirigió al Primer Ministro, Ministro de Economía y al propio Ministro de Agricultura, que se puede leer en el siguiente enlace: Carta AGAP.

Fuente: Diario La República

Entre otras cosas, AGAP expresa:

“En la última sesión del Comité Directivo del PNIA del20 de febrero de 2017, el Viceministro de Políticas Agrarias del MINAGRI declaró que el Ministro siente que no tiene control sobre el Proyecto y desea modificar las condiciones del mismo  para poder nombrar directamente a gente de su confianza, por lo requirió encargar la Dirección Ejecutiva del PNIA al Jefe del INIA, yendo en contra de lo establecido en los procedimientos del Manual Operativo del Proyecto aprobado por el Banco Mundial y el BID. Ante esto el Comité Directivo del PNIA se negó a aprobar dicha decisión por ser contraria a lo establecido en el Manual Operativo del Proyecto el cual indica en su Anexo 10 que: «1. Ante la culminación del contrato del Director Ejecutivo, el  Director de  Operaciones  asume  interinamente las  funciones   de  Director Ejecutivo, en adición a sus propias  funciones. La encargatura  se realiza mediante Resolución del jefe del INIA»”.

Lo más sorprendente es que el Viceministro no quiso someter  a votación su propia  e irregular solicitud para  encargar  la Dirección Ejecutiva  del PNIA, porque  se dio  cuenta  que  no  iba  a ser  aprobada,  y manifestó que eso era, precisamente, lo que el Ministro no quería.

“Nuestro  representante, el Dr. Carlos Zamorano, insistió  en tres  oportunidades para que se someta  a votación el pedido  del Viceministro para la irregular encargatura  y que conste en actas el resultado, el Viceministro optó por pedir un cuarto intermedio aduciendo  que tenía que hacer las consultas políticas del caso con  el Ministro. Luego del cuarto  intermedio, en  que  el Viceministro se retiró de  la  sala acompañado de sus dos asesores, regresó para informar que la decisión era suspender la sesión porque se  había  llegado  a  un  entrampamiento. Ante  la  negativa  de  los  miembros del  Comité   Directivo insistieron en que  se someta  a votación la encargatura  de la Dirección  Ejecutiva  del PNIA para luego pasar a los demás puntos de la agenda, el Viceministro dijo que esa era la orden del Ministro, por lo que la sesión quedaba  suspendida  hasta una nueva  citación. La decisión  del Viceministro fue objetada por los miembros del Comité Directivo, no obstante, lo cual, el Viceministro dio por levantada  la sesión. Los votos en contra han quedado debidamente registrados”.

Cabe señalar que, al inicio de la sesión, y por expreso pedido  del representante de AGAP, se procedió  a dar  lectura  y aprobar el acta de  la sesión anterior, la cual tenía  como  único  acuerdo: «Postergar  la elección  del Dr. Erick Rubens Echegaray Wilson, como  Director Ejecutivo  del PNIA, para  la  siguiente sesión del Comité  Directivo, a efectos  de proceder a revisar mejor  el informe del Comité  Ad-Hoc y los antecedentes». En un primer momento, el Viceministro se opuso a la lectura y aprobación del acta de la sesión anterior, y pidió  que  se dejará  para la siguiente  sesión, a lo cual se opuso  el representante de AGAP y solicitó  que se votara. La votación mayoritaria obligó  a la lectura y posterior aprobación de la referida  acta”.

“El punto  siguiente  en la agenda, acuerdo del acta de la sesión anterior, cuya aprobación se acababa de dar, era  la elección del nuevo Director Ejecutivo  del PNIA, sobre la base de los resultados obtenidos en el proceso de selección llevado  a cabo por el Comité Ad-Hoc, especialmente designado para ese efecto por el Comité  Directivo  del PNIA. Este acuerdo también lo Impidió el Viceministro, toda vez que quería desestimar todo el proceso de selección para tomar control, también, de la selección y nombramiento del nuevo Director Ejecutivo del PNIA, a pesar de que su desarrollo había sido debida y regularmente informado al Comité Directivo del PNIA, y contaba con la NO OBJECIÓN de los bancos prestatarios. Esta aseveración  está fundamentada en la agenda presentada  por el Viceministro para la sesión del Comité Directivo  del  PNIA, cuyo punto  tercero era: «Nombramiento del nuevo  Comité  para la selección  del nuevo Director Ejecutivo del PNIA».

Es evidente pues que en el Ministerio de Agricultura si hay irregularidades que el ministro no ha levantado, y por la naturaleza de las instituciones que dependen del mismo, requieren la mayor atención por parte del gobierno.

Lamentablemente, esto coincide en el tiempo, con una serie de otras preocupaciones de la ciudadanía en cuanto a la permanencia de ciertos ministros en el gabinete y suponemos, que las necesarias correcciones, se harán paulatinamente. Lampadia